La estrategia de tratamiento de residuos de las Tres R para el reciclaje es la siguiente:
Reducir, acciones para reducir la producción de objetos susceptibles de convertirse en residuos.
Esto se hace a través de una compra responsable a la hora ir al supermercado. En muchas ocasiones, los alimentos que se conservan en materiales reciclables, requieren de menos conservadores, por ejemplo aquellos contenidos en tetrapack o en vidrio. Y la adquisición de presentaciones rellenables (rellenapack) disminuyen notablemente el volumen de basura que se genera en los hogares.
Reusar, acciones que permiten el volver a usar un producto para darle una segunda vida, con el mismo uso u otro diferente.
A veces hay que emplear un poco de imaginación, pero si logras reutilizar productos o envases, por lo menos una vez, ya es un avance. Por ejemplo, los contenedores de huevo de plástico sirven como un excelente germinador, ya sea que te guste la jardinería o estés iniciando un cultivo hidropónico. Las cajas metálicas que contienen galletas suelen ser un buen organizador para elementos de costura o manualidades, por ello, algunas marcas optan por emitir ediciones especiales de cajas decoradas que son perfectamente reutilizables.
Reciclar, el conjunto de operaciones de recogida y tratamiento de residuos que permiten reintroducirlos en un ciclo de vida.
El reciclaje es realizado en mayor medida por el sistema saneamiento de cada ciudad, en donde separan el vidrio, metal, cartón o tetrapack para su procesamiento y reciclaje; Nuestra parte en esta etapa, consiste en separar la basura adecuadamente para facilitar estos procesos de reciclaje (orgánica e inorgánica). Aún cuando no haya un sistema definido para la separación y reutilización de residuos o plantas de reciclaje en tu ciudad, es importante que separes tu basura; generalmente hay personas que se dedican a buscar en la basura elementos factibles de reutilización y los venden; en México se llaman “pepenadores”, trabajan directamente en los basureros y se encargan de esta tarea.
